¡Hola! Seiiti Arata. Cuando experimentamos problemas y queremos hablar acerca de ellos… ¿cómo podemos hacerlo y simplemente ser escuchados? Hay cuatro técnicas de comunicación sencillas para evitar el drama o protegernos de parecer muy quejones.
En el video anterior descubrimos cómo dejar de quejarnos. Quejarnos es algo ineficiente cuando existen otras opciones que nos pueden traer otros resultados.
Simplemente hablar de nuestros problemas puede ser satisfactorio, al menos mientras seamos positivos y esto es lo que aprenderemos hoy. Preparen sus plumas y papeles y comencemos.
1. Aclara las expectativas antes de hablar
Comienza por dejar claro lo que necesitas. ¿Quieres simplemente hablar y ser escuchado?
¿O esperas algún consejo? ¿Estás preparado para crear un plan de acción?
Si estás en un momento en que solamente necesitas que te escuchen, si buscas empatía, por favor exprésalo a la persona para que esta entienda. Hay una razón para eso y la verás en el paso dos.
2. Prepárate para recibir consejos no solicitados
Este es el trágico origen de tanto drama y debes prepararte para esto.
Hay muchas buenas intenciones ya que las personas que te aman quieren arreglar las cosas. Quieren que cambies porque creen que eso te hará más feliz. Quizás creen que con hablar no te podrán ayudar así que evitarán escucharte.
Es un reto para tus amistades y familiares simplemente escuchar y estar contigo y aceptarte como eres. Si sienten tu dolor y escuchan tus problemas, esto los llevará a querer encontrar soluciones y arreglarlos por ti.
Aquí es cuando el paso tres se vuelve útil:
3. DETÉN EL TIEMPO
Cuando llegue el consejo que no le pediste a nadie (¡y mira que llegará!) haz que el tiempo se detenga. En otras palabras, detente un momento y repasa tus sentimientos.
Cuando ellos intentan cambiarte, ¿te sientes querido? ¿Sientes que este consejo que no pediste es una muestra de cariño? Si aceptas ese consejo como un regalo, entonces deberías discutir tu plan de acción con ellos.
Sin embargo, puede que el consejo te suene como un sermón. Quizás te sientas juzgado y hasta resientas que tus expectativas de empatía han sido ignoradas. Quizás te sientas avergonzado o sientas hasta enojo cuando tus defectos sean señalados por tu acompañante y eso levantará un impulso por defenderte de esa crítica.
Mantén el tiempo detenido, toma conciencia de las emociones que sientes y re direcciónalas para que puedas tener un resultado positivo de esa situación.
Primero esfuérzate por comprender a la persona. ¡Mantén el tiempo congelado! Aguanta tu deseo de ser comprendido. Primero nos pondremos en los zapatos del otro.
Muchas veces las personas que nos aman tienen altas expectativas sobre nosotros. Puede que no entiendan nuestras decisiones porque ellos tienen sus propias experiencias de vida y valores. Sus experiencias pasadas van a influir en su capacidad de escuchar con una mente abierta. Así que ellos nos mirarán a través de sus lentes- y nos proyectarán su imagen del mundo.
Así es como ellos tratan de ayudar: poniéndose en nuestros zapatos y sugiriendo cambios para tener una mejor vida.
Ahora vamos al paso final.
4. Sé agradecido y retrocede
Una vez reconocemos estos sentimientos y nos autoevaluamos, una vez comprendemos a la otra persona, entonces podemos dejar correr el tiempo otra vez y agradecerles. Podemos decirles que entendemos que tienen buenas intenciones por la forma en que comparten sus ideas y sugerencias.
Podemos usar este momento para recordar que todavía no estamos buscando un cambio porque lo que importa en el momento es tener empatía, contar con alguien que nos pueda escuchar y aceptarnos como somos.
Aquí puedes utilizar la técnica de retroceder. Podemos preguntar de manera amable “Escucha, esto es algo importante para mí en estos momentos. ¿Podrías decirme lo que me escuchaste haber pedido de ti?
A estas alturas es muy probable que se nieguen diciendo “No hay problema-entiendo”. O quizás te contesten erróneamente, sacando de perspectiva que lo que necesitas es ser escuchado y que no necesitas consejos en este momento.
El retroceder te dará frutos cuando la persona con la que hablas pueda dar, en sus propias palabras, una contestación que vaya con tus expectativas. Esto indica que has sido existoso al hablar de tus problemas.
Por favor nota que es importante hablar con alguien si estás en peligro, si estás siendo abusado o tienes algún problema serio. En casos especiales la persona correcta para contactar es un profesional, ya sea la policía, un médico o algún otro profesional licenciado que esté apto para ayudarte. Hoy nos hemos enfocado solo en problemas suaves para los cuales es apropiado simplemente pedirle a algún amigo que nos escuche.
A veces tenemos la necesidad de ser escuchados cuando hablamos de nuestros problemas. Recuerda; si estás listo para tomar acción y discutir diferentes ideas y consejos, perfecto. Si no lo estás, retrocede y aclara que solo necesitas ser escuchado.